sábado, 3 de julio de 2021

CARTA A ROSSY

 

CARTA A ROSSY

 

Hola Rossy, que agrado escribirte, la escritura manuscrita, pensada, reescrita y extensa es uno de los medios que no debió permitirse desaparecer. siento que mis manos, en este modelo, al tomar el bolígrafo, son capaces de graficar palabras, que, con elocuencia y cierta precisión, logre resumir tanta amistad atesorada en años de compartir de tu niñez y mi temprana adultez, sobre todo ahora, que también se han acercado tus hijas. Te veo enérgica y con metas claras cónsonas con la personalidad que siempre te ha caracterizado.

De mí, cuento que me encuentro feliz con lo que estoy llevando a cabo, sobre todo los momentos de estudio que he tenido en suerte compartir con tus hijas: Daniella y Rossany, ambas torbellinos con vórtices a punto de explotar. Que personalidades tan avasallantes y tan demostrativas de provenir de un tronco capaz de imponerse a cualquier reto que la vida le depare.

Las clases han sido fenomenales, sobre todo en lo que respecta leer adecuadamente frases cargadas de contenido, que, en resumen, es lo recomendado por las instituciones de estudio y/o el profesor encargado de las asignaturas que cursan sus hijas en la ruta de preparación para el reto académico que se han propuesto. Esas sugerencias de estudio las siento adecuadas y apropiadas para ritmos acelerados, con ellos y el orden que han sido planificados y expuestos permiten asumir el reto de lograr niveles para la convivencia profesional en un mundo tan exigente y cambiante; sobre todo en tiempos de globalización.

Aunque debo anexar un parágrafo para dejar sentado que eso que se llama globalización siempre ha existido, con las respectivas diferencias a considerar; sobre todo en la capacidad actual de que el mundo sepa en segundos lo que ocurre en su antípoda. Las distintas sociedades han migrado en todas las épocas, aunque sólo se han hecho populares las de los vikingos, las de los mongoles, las invasiones de España e Inglaterra y la conquista del oeste de los Estados Unidos.   

Los materiales sugeridos por las instituciones en las que estudian tus hijas están escritos siguiendo la rigurosidad de las estructuras en cadena, los cuales, es recomendable, para el logro del éxito que los estudiantes sigan con rigor y sin saltos, cualquier material no internalizado e incluido en la zona de comodidad individual producirá ruidos estruendosos en los que le siguen.

Sin embargo creo, no todo es perfecto, que desarrollan, apresuradamente, temas que sólo son cónsonos para personas que han superado las estructuras cognitivas de Jean Piaget. Esto indica, irrevocablemente, que el sugerente para el manejo de estas estructuras no ha leído los trabajos de psicólogos especializados en temas de capacidad cognitiva acorde con la edad de los estudiantes.

Aunado al parágrafo anterior están las sugerencias de Burrhus Frederic Skinner, psicólogo y filósofo social que, entre otras, plantea que los tiempos naturales, para el aprendizaje, cualquiera sea la rama, requiere sobre las diez mil horas, equivalente a dos mil días o seis años. Tiempos probados usando estadísticas y correlaciones reconocidas por investigadores. Razón por las que la mayoría de profesiones universitarias sugieren este tiempo de formación más otro tanto que organizará el aprendiz cuando ya esté en su etapa de aplicación y madurez. Como ejemplo las profesiones de la música cuyos discípulos inician desde los seis años y a los catorce, ocho después, manejan las estructuras básicas con cierta precisión para iniciar la etapa del aprendizaje personalizado, de cuyo acierto y empeño depende el éxito

En cuanto al tiempo continuado para las faenas profesor alumno, en el sistema presencial, se sugiere de noventa minutos que, por lo general, es de aclarar, los diversos sistemas educativos lo calculan como dos horas completas para el respectivo pago de servicios, asunto por el que estoy en total acuerdo por cuanto los niveles de concentración y entendimiento sobre un tema tiende a disminuir cumplidos los noventa minutos y los profesores acostumbra la libertad de cátedra para desarrollar curriculas denominados ocultos, nombre éste debido engloba lo que no está planificado por la unidad académica.

La modalidad a distancia con comunicación síncrona, considero que debe aplicarse con estrategias cercanas a la presencial real, con sus respectivas actividades que le son propias, por cuanto puede ser utilizadas con igual o superior intensidad de enseñanza-aprendizaje dado que se puede contar insimultáneo con recursos útiles como: Excel, Works, geogebra, editor de ecuaciones, látex y calculadoras científicas disponibles en la red, tablas. Además de pizarras virtuales de uso compartido a síncrono.

Es aconsejable considerar que las modalidades a distancia pudieran recurrir en un solo ambiente personas de nacionalidades distintas y con niveles de comodidad variados sobre el tema en desarrollo.

La experiencia que he tenido con tus hijas, amiga Rossy Carvajal, ambas habitantes de los Estado Unidos, Miami, han sido, para mi crecimiento profesional, bastante provechosa, al igual, como otras con alumnos de Argentina, Pablo Briceño; de México, mi sobrina Juliana Moreno, también de Orlando, Ana Lucia y un brillante estudiante, que también vive en EEUU, de nombre Johan, quien, a pesar de lo exitosa que fueron los encuentros, activo una pausa en la comunicación educativa con la firme convicción de que habrá otros momentos de estudios compartidos conmigo en oportunidades futuras. Todos ellos adolescentes, al menos la mayoría, entre  once y quince años de edad, salvo Paulo Briceño que es un diseñador  de software que pertenece al grupo etario de la temprana mayoría de edad de tu hija Rossani.  

Creo que ayuda, por si deseas compartir esta carta en alguna lectura familiar, en esos momentos que la familia se sientan simulando un mesa redonda, para el descanso de las jerarquías en los rangos naturales,  relatar aunque sea en breves líneas, la razón por la que ustedes como familia, incluyendo mi comadrita Marina Vivas, han contribuido con publicar mi oferta de trabajo, es que tuve, por destino de la vida, ser su vecino en el Bujarú, de la ciudad de Trujillo, Venezuela, por lo que nos hicimos amigos de familia, yo adulto, claro está, y tu una niña aún párvula. Tuve la dicha de compartir aprendizajes con todos ustedes incluyendo el manejo del computador como herramienta con Gabriel, su hermano, quien hoy es un exitoso ingeniero petrolero que tiene al mundo entero, con sus posos del oro negro, como campo de trabajo.  

Tiempos hermosos que recuerdo con sumo orgullo, como también llevo en mis memorias positivas cuando les prepare cotufas y tequeños una noche de meteorititos que engalanaron el cielo y la mayoría de los niños vecinos disfrutaron el espectáculo cósmico en la azotea del Bujarú, donde felizmente vivíamos, ustedes apto uno, yo y mi familia en el tres.

Ese momento de apoyar a los niños en el paseo nocturno por la parte superior al edificio residencial donde vivíamos para la teleobservación cósmica del espectáculos de luces ofrecido es cónsono con nuestra familia de educadores  y formadores pues, sabemos, igual a la enseñanza que nos dejó el creador del paraíso, en la figura de la prohibición del consumo de la fruta madura del árbol del conocimiento del bien y el mal, es aplicable para indicar a nuestros hijos que el saber no es posible consumirlo desde lo hecho por otros, más bien, hay que recorrer la ruta desde la preparación del terreno y suborear la experiencia de que algunos granos de la siembra sólo nacen para morir pronto, pero aquellos que logran crecer, gracias al riego individual diario, fructificará. También hay que cuidarlos para que las plagas no la corroan, para finalmente consumirla y tomar su semilla y replantarla para nuevas enseñanzas y recorrer organizado para otros.  

Me corresponde, lo hago con sumo placer, darte las gracias, incluyendo a tus hijas, por haber publicado mi oferta de trabajo como profesor en las redes sociales de los Estado Unidos. Te cuento que recibo llamadas telefónicas donde solicitan mis servicios e indican que han leído la publicidad que ustedes, como bien para mí, han subido en los grupos de gente latina a los que pertenecen. Gracias infinitas nuevamente. 

Tenía tanto que contar y agradecer que sobrepase el lineaje acostumbrado para las cartas personales, pido disculpas, tengo muchas cosas por contarte.

Atentamente, su amigo:

Dr. Edgar Bautista Sánchez Briceño.