RETORNO AL PARAÍSO
miércoles, 2 de marzo de 2022
RETORNO AL PARAÍSO
EL DISCURSO DE LAS FRACCIONES SIN LA FUERZA DE LAS PROPIEDADES
EL DISCURSO DE LAS FRACCIONES SIN LA FUERZA DE LAS PROPIEDADES
Explicar matemática usando la producción de los gigantes de
la organización es tarea, aunque ardua, no tan complicada. Hacerlo sin estas
herramientas de la simplificación, desde el lenguaje básico, para un
adolescente que recién comienza la experiencia en las fracciones, se hace
copioso, aunque interesante y un excelente reto para amplificar los estados de
comodidad cognitiva.
La fracción 6/2, es legible a primera vista, organiza, un
solo contexto, que seis objetos deben ser compartidos en dos grupos, por lo que,
cada uno tendrá tres de ellos. Hasta ahí es común entenderlo. Sin embargo 7/2
comienza a complejizarse, por cuanto los dos grupos de exigencia tendrá tres
elementos y una parte de otro, luego que a esté se le aplique segmentación; en
este caso, partirlo en dos. Por lo que cada grupo tendrá 3+1/2. Para esta
expresión conviene retornar a una notación más legible que se ha dejado de usar,
en nuestro medio, luego de la popularidad de la representación decimal, 3+1/2=3+5/10=5+0,5=5.5.
Sin embargo, aún es usada en la demarcación de las llaves que se usan como
herramientas en los talleres mecánicos, 3+1/2 sugerirle escribirla cómo 31/2
en vez de 7/2, tres
y un medio, pues es fácil observar que cada grupo contiene tres unidades
enteras más media parte de otra.
La fracción 2/3 exige mayor compromiso cognitivo, eso de que
haya dos objetos y que haya que organizarla para el disfrute de tres grupos, no
es de comprensión inmediata, sin embargo, la sabiduría de un maestro, induce
las preguntas correctas y el discípulo puede lograr dividir el objeto de
observación en tres trozos iguales cada uno y asignar dos de ellas a cada uno
de los tres grupos. Aunque esta no es la única solución equitativa es la que
mejor contribuye cuando aún las propiedades de las fracciones no son del manejo
del que busca entender.
Este tipo de compromiso en el aprender, genera cambios de
paradigma en el pensar del objeto y se transita de lo entero hacia lo
fraccionado en partes iguales.
Concienciado las fracciones, se construye el hipervínculo o puente
de acceso para entender (7/2)/3, lo cual significa que hay siete medias partes
de algunos objetos, posterior a un proceso de división de cada una en dos, se
tomaron siete para ser compartidas en tres grupos. Si los objetos fuesen naranjas, hay siete
medias de ellas, listas para exprimir; por alguna razón, se ha preferido
entregarlas sin hacerlo, seis de las medias forman tres completas, por lo que
cada uno de los tres grupos tienen garantizado recibir una naranja en formato
de dos trozos. En pro de la equidad de la repartición, cada grupo exigirá igualdad
en el reparto; la media naranja restante habrá que subdividirla de nuevo en
tres partes y así se obtendrá, adicional para cada uno, (1/2)/3. Media naranja
partida en tres partes es equivalente a dividir la naranja completa en 6, Se
toma una de ellas, por lo que (1/2)/3=1/6. Conclusión, cada uno de los tres
grupos recibirá 1+1/6=11/6 naranjas.
El asunto se complica cuando se desea entender que significa
28/(7/2), veintiocho dividido por siete medios. Recordar que el denominador se
está asociando al total de grupos y la resultante a la cantidad de elementes
que corresponde a cada uno. Hay que repartir 28 objetos en 7/2 grupos. Ayuda a
mejorar el conflicto se piensa que hay 7 grupos y luego a cado uno se subdivide
en 2 subgrupo po
LA VISITA Y EL PASTOR
LA VISITA Y EL PASTOR
Uno de mis amigos, el que comparte mis momentos de angustia
y los de alegría, escribe relatos, en formato autobiográfico, denominado “El
Niño del Palmar”, los intituló así, por cuanto en ellos narra memorias de un
niño que habitó la aldea del Palmar en el estado Táchira. Desde allí,
estimulado por una de sus hermanas, que trabajó para una familia dueña de im
panadería, comenzó el peregrinar que lo ha llevado a diversas partes del mundo,
donde ocurrieron galimatías inextricables que ha ido relatando en el transitar
de sus memorias y la inspiración de algunas noches de plenilunio.
El niño del palmar está acompañado. Para nadie es un secreto
que cualquier ambiente, donde la presencia femenina sea asidua, se llena de
influjos positivos y todo florece, todo luce, ínsita la visita. Basta una mujer, sin son varias, mejor, para
que las casas se llenen de luz, de perfume, de visitantes, de flores que
titilan cuando se besan. Eso está ocurriendo en la casa del “Niño del Palmar”.
Por alguna razón, el personaje tan querido por el mundo
lector, “El Niño del Palmar” ha dejado de aparecer. Luego de profundas
investigaciones y seguimiento, se logró descubrir que el autor de estos relatos
de fábula, recibió la visita de las muchachas de su familia, las del segundo
grado consanguíneo. Como es natural, la presencia de ellas, llenó todos los
espacios de su autobiográfica memoria y está henchido de atenciones y de bromas
que hacen reír. Ahora se luce, con cierto aire de arrogancia, por la grata compañía.
Descubrir la razón de la ausencia del Niño del Palmar en las
páginas escritas, no fue tarea sencilla. Sin embargo, hay un hecho, antes
fortuito, que a diario esta ocurriendo; un personaje ahora pasa por el frente
de mi casa y grita mi nombre, con fuerza innecesaria, para que me apreste en atenderlo.
Luego de reflexiones de rigor, me di cuenta que lo hace con la intensión de
hacer sentir su presencia, quiere que las muchachas sepan que está en las
cercanías, lo ha logrado, no pasa desapercibido. Por lo general, ataviado de
ropajes nuevos y lujosos, se hace acompañar de un perro pastor alemán. En
varias oportunidades he visto que el perro lo arrastra, dadas las diferencias
corporales y de tamaño entre el humano y el ladradador: roncador, arrastrador, aullador.
Él aguanta el chaparrón para no quedar mal, aunque su rostro se enrojece. Tiene
todos los trucos que el Gabo de las plataneras resumió en el personaje de
Macondo, Aureliano Buendía.
La vestimenta que usa el asiduo visitante de la reja de mi
casa, está justificada, es notable la elegancia en el vestir de las hermanas
del “Niño del Palmar”, una de ellas acostumbra variados atuendos que la hacen
ver interesante: Bufanda al cuello, zapatillas combinadas con sus finos
vestidos, peineta curvada para organizar su frondoso cabello, hablar anecdótico
de su transitar por el mundo, sonreír refinado, caminar en zigzag tal cual las
mises en los concursos de belleza, libro de lectura diaria. Es toda una dama de
la belleza.
En consonancia, el amigo que cadena en mano es arrastrado
por el “pastor alemán”, viste ropas que muestran su temple atlético, al menos
eso intenta, es un desfile a diario de las formas de vestir de los jugadores de
la NBA o FIFA. Las botas, siempre nuevas, muestran su solvencia económica.
Creo que el ritual de encantamiento ha sido productivo por
cuanto a veces hace el recorrido en dos oportunidades el mismo día.
Las damas hermanas del Niño del Palmar están bajo vigilancia
permanente de un hermano, no es fácil acercarse, ciento cincuenta kilogramos de
músculos, garrote de dura vera en mano que luce marcado por signos tallados que
indican que han sido varios los pretendientes ahuyentados. Originalmente el
Pastor Alemán tenía la intensión de garantizar el acercamiento, sin embargo, es
notable que el efecto del garrote y los arrastres del perro, han producido el
ausentamiento.
Los relatos de encantamiento, se florecen de viajes por
Inglaterra en el que el túnel desde Francia toma protagonismo, otras veces la
travesía hacia el Perú por los fríos paisajes de Colombia y Ecuador y la
experiencia de haber vendido café a la gente de vestimenta florida y hablar
quechua. Ella los escucha con atención,
cuando el ladrador lo permite, hace énfasis en las madrugadas de trabajo frente
a una máquina de coser. Él escucha impaciente por cuanto aún hay, para largo
rato, historias que contar, sobre todo su experiencia como dirígete de la
asociación Scauth de Venezuela.
Ella, noble de temperamento y educada en el saber escuchar,
espera y espera la oportunidad de contar también sus relatos de vida.
Dr. Edgar
B. Sánchez B.
ENTRE MALVADOS
ENTRE MALVADOS
DISCURSO DE MÁSCARAS
DISCURSO DE MÁSCARAS
Es sorprendente como un político de oficio, más bien un alborotador
de oficio, pasa de defender la soberanía
de las naciones y la no intervención a apoyar una guerra abierta, intervencionista,
a un pueblo o nación que busca, precisamente eso: La soberanía.
Dr. Edgar B. Sánchez B.
domingo, 13 de febrero de 2022
UN SANCHOCHO PARA EL PREPARADOR
UN SANCHOCHO PARA EL PREPARADOR
Cuando me inicié como docente universitario, lo hice desde
la figura de Preparador, cuya
posición se logra cuando se ha avanzado en la carrera, en mi caso, matemática
pura. Esta posición que te permita pararse ante estudiantes, tiza en mano, y
con un pizarrón para escribir, requiere de notas sobresalientes en la
asignatura a dictar y haber ganado un concurso de oposición para no graduados.
Cuatro años, desde el tercer semestre hasta el grado,
ostenté esta figura, incluyendo los ascensos posibles, hasta llegar a
preparador a tiempo completo. El salario devengado, aunque no mucho, permitía
ciertos lujos que ahora no tengo, aunque mi formación académica cuenta con
varias maestrías y doctorado.
Todos saben que ahora me correspondió, en fuerza, ser
preparador de nuevo. Lo llamo así por cuanto la actividad que realizo hacia
varios países, en concienciar sobre asuntos de la matemática, tiene la
particularidad de que la decisión definitiva sobre si el rendimiento es
suficiente, la impone el profesor de la cátedra.
Aunque, como profesor, siempre fui atento a los detalles e incentivaba
la repetición como recurso de fijación cognitiva del conocer, ahora me es, en supremacía
importante, por cuanto debo visionar los temas con los que serán evaluados, el
estilo de las preguntas, las palabras que usará el profesor en la redacción. Me
he dado cuenta que ser preparador no es para nada sencillo.
Visionando y ya alertado, por uno de mi alumnos, centré mi
atención en lo que podría ser temas que me proporcione fuentes de trabajo, así
que este fin de semana, sábado 12 y 13 de febrero de 2024, concentré mi esfuerzo
en estudiar las leyes de: Kirchhoff,
Ohm, Coulomb, las cuales, en éxtasis, desde muy tempranas horas, me
aislaron del mundo exterior incluyendo el horario para comer.
A las una de la tarde del domingo, Pedro Duarte, mi vecino
del frente, con una taza de abundante sancocho cruzado me hizo recordar que
estamos acostumbrados a sentir apetito a esa hora. Tome el envase del hervido
que venía acompañado de arepa de maíz, procesado en casa. Quise continuar con
el tema de estudio, no pude: el olor a jojoto, la costilla con gallina y la
arepa caliente me hizo sentar a disfrutar de tan maravilloso regalo.
Definitivamente el mejor amigo y hermano es el vecino más cercano.
Dr. Edgar B. Sánchez B.
viernes, 11 de febrero de 2022
PRACTICAR
PRACTICAR
Practicar es una
de las palabras que todos manejamos con precisión de significado.
Practicar es uno
de los procesos que se requiere en abundancia para lograr el concienciarse
sobre el saber de algo.
Para que algunos aprendizajes sean cada vez más naturales a la
persona que los desea, se requiere que éste esté atento a toda oportunidad que
se presente a fin de que los pasos necesarios se realicen hasta lograr la
actividad con la mayor precisión posible y, en el mejor de los casos, con
agregados importantes para mejorarla.
En el devenir de la repetición, del practicar, afloran
detalles de lo que se aprende y lo fortalecen, se perfecciona.
El objeto sólo se muestra parcialmente en los primeros
intercambios, mejorará en la medida que el sujeto se supere cognitivamente
hacia él y, sin embargo, su totalidad permanecerá oculta. Es la estrategia del
objeto para obligar otro momento de intercambio. El practicar es más que el
repetir, es mejorarse en cada repetición.
Algunos ejemplos nos pueden ayudar sobre la importancia del
practicar:
El músico ante la perspectiva de mostrar su obra, que
pudiera ser una única pieza, sólo cinco minutos, para un gran escenario; la
practica múltiples veces hasta lograr ejecutarla sin impreciso alguno, por supuesto,
un ejecutante consumado que ha practicado la mano de la armonía y la de los
arpegios o percusión, logrará belleza desde los primeros intentos, sin embargo,
su cerebro acondicionado para el ensayo, le exige una y otra vez hasta sentir
la comodidad y llenarse de una extraña felicidad.
En el devenir de la repetición, del practicar, afloran
detalles que se muestran en la medida que ese algo que se aprende, se perfeccione.
Invito a todos a practicar todos los
aprendizajes que tengan a mano.
Dr. Edgar
B. Sánchez B.